Tengo un tío, Tony, que vive frente a mi casa y al cual es difícil ganarle una. Hace unos días le regale un muy buen corte de agujas para que lo probara y cuando le pregunte que le pareció me contesto que estaba buena pero que como era de res en engorda estabulada carecía de sabor así es que me dijo que conseguiría unas autenticas agujas de rancho. Días después me hablo y fuimos a la carnicería *"García" que es el lugar en donde el compra la carne ya que sacrifican animales crecidos en el monte (matorral tamaulipeco) a los cuales puede considerarse orgánicos, ahí adquirimos unos magníficos cortes de 4 cm. de grueso y mas de 600 gramos de peso.
Los cortes contaban con carne por ambos lados del hueso ya que la pieza nos había sido reservada y cortada a nuestro gusto.
A los cortes se les aplico marinado para churrasco media hora antes de ponerlos a la parrilla a fuego medio.
En esta ocasión reconozco que me gano mi Tío, el resultado fue un delicioso y jugoso corte de carne que debe el carácter de su sabor a la mezcla de matorrales y zacates nativos de los que se compone la dieta de la res.
Saboreamos estos cortes en compañía de nuestros hijos mientras nos deleitábamos observando el magnifico atardecer desde la orilla de la presa "La Boca".
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